El Gaudí de las pampas
“Salamone: Arquitectura Audaz” es el nombre de la muestra fotográfica que se exhibe en la Casa Argentina de Roma hasta marzo de 2018.
El arquitecto Francisco Salamone, profundamente ligado a la Sexta Sección, donde desarrolló la mayor parte de su obra arquitectónica, es conocido en Argentina como el “Arquitecto de las pampas” y en el mundo como «el Gaudí de las pampas».
Luego de muchos años su obra se ve nuevamente reconsiderada, valorizada y citada por parte de la prensa especializada, estudios de arquitectura y muestras de fotografías, invitando a que en plan turístico la gente se acerque a conocerlas.
En ese marco, la embajada argentina en Italia inauguró una muestra fotográfica dedicada a su singular obra arquitectónica, bajo el nombre de Salamone: Arquitectura Audaz, que exhibe más de 30 fotografías artísticas de sus más emblemáticos edificios, entre ellos el cementerio de Saldungaray y el matadero de Guaminí. Permanecerá en la Sala Mora de la Casa Argentina de Roma hasta marzo de 2018.
Tomás Ferrari, embajador argentino en Roma, Irma Rizzutti, la agregada cultural en la capital italiana y Lucas Gioja, curador de la muestra, sugirieron un recorrido de tres días para conocer «los caminos de Salamone» y visitar sus obras más representativas en pueblos bonaerenses como Carhué, Laprida y Coronel Pringles, de la Sexta Sección y Azul y Chascomús.
Para Ferarri, esta muestra «representa también un claro ejemplo de la integración que tuvo la inmigración italiana en la Argentina». Quien también estuvo en la presentación fue el historiador argentino Eduardo Lazzari, presidente de la fundación Salamone.
En 2001, sus grandes edificaciones fueron declaradas Patrimonio Cultural de la Provincia de Buenos Aires por el Senado y la Cámara de Diputados de la Provincia, y en 2014 Monumentos Históricos Nacionales y Bienes de Interés Histórico y Artístico Nacionales.
Francisco Salamone
Fue un arquitecto italo-argentino, que vivió y trabajó en Argentina; construyó en apenas cuatro años, entre 1936 y 1940, más de 60 edificios en 25 municipios de la Provincia de Buenos Aires.
Salamone nació el 5 de junio de 1897 en Buenos Aires, uno de los cuatro hijos de un arquitecto de Catania, Sicilia. Después de egresar del Colegio Otto Krause de Buenos Aires decidió seguir los pasos de su padre en el oficio de la construcción. Inició sus estudios en Universidad Nacional de La Plata y los finalizó en la Universidad de Córdoba. En 1917 egresó con el título de arquitecto e ingeniero. Intentó hacer carrera política, postulándose como candidato a senador provincial por el Partido Radical, sin mayor éxito. Se casó con Adolfina Vlieghe de Croft de ascendencia austriaca, con quien tuvo cuatro hijos, Ricardo, Roberto, Ana Maria y Stella Maris.
Su obra comenzó en la década de 1930 en la provincia de Córdoba. Entre otros lados trabajó en Villa María haciendo allí una obra de pavimentación que fue un fracaso, un matadero, parque del cementerio, algunas plazas (en especial la denominada Centenario). Todas estas obras fueron realizadas en una intendencia plagada de hechos de corrupción. Salamone se fue de la ciudad sin terminar algunos de sus trabajos (por ejemplo el matadero, que tuvo varias deficiencias), en tanto que obras como el asfaltado de calles no resistió los primeros embates del clima. Luego se fue a trabajar a la provincia de Buenos Aires. Allí, cuando se intentó modernizar a la obra pública de los municipios del interior de la Provincia de Buenos Aires.
Salamone tenía una gran amistad con el gobernador de dicha provincia, Manuel A. Fresco, quien era admirador de Mussolini (tenía retrato de Mussolini y de Hitler en su oficina), hecho que no puede dudarse viendo el autoritarismo de Fresco y su apoyo a grupos nacionalistas que iban en contra de judíos en distintos lugares de esa provincia. Éste le encomendó a Salamone el trabajo de realizar edificios públicos en la pampa húmeda, dándole carta blanca para sus proyectos. La idea era fomentar el crecimiento de algunas pequeñas ciudades y pueblos del interior.
Salamone llegó a construir más de 60 grandes obras en pocos años, y otras tantas obras menores. Lo que quizás más deba resaltarse de la obra de Salamone es espectacularidad de aquellas construcciones que llegaban a elevarse a unos treinta metros al lado de casitas de poco más de dos metros. La arquitectura de Salamone nada tenía que ver con el contexto en que se erigió.
Su trabajo se caracteriza por tres tipos de construcciones: municipalidades, portales de cementerios y mataderos, aunque también realizó plazas, pórticos, mobiliario urbano y de interior a los palacios municipales, como así también veredas y luminarias para mantener un estilo coherente. Sin lugar a dudas que el Estado (autoritario de Fresco) quería hacerse presente en los momentos importantes de la vida de los bonaerenses (municipio, matadero y cementerio.)
Palacios Municipales, cuyas características principales son la monumentalidad y las torres que simbolizan la avanzada de la civilización sobre el desierto. El Palacio Municipal de Coronel Pringles es uno de los tantos exponentes. De la misma forma hay que nombrar como originales y emblemáticos los Palacios Municipales de Carhué, Guaminí, Pellegrini, Rauch, Tornquist, Puán, Alberti, Laprida, Adolfo Gonzales Chaves, Vedia. Su obra más importante es el Palacio Municipal de Adolfo Alsina (En Carhué), inaugurado el 3 de diciembre de 1938, que combina Art decó, Futurismo Italiano y Funcionalismo inspirado en el Bauhaus. Fue declarado “Monumento Arquitectónico Municipal”.
Los Cementerios
Se caracterizan también por su monumentalidad y enormes portales que simbolizan el cuerpo humano reintegrándose a la tierra. Suelen ser obras integrales y no solo pórticos. Son especialmente impactantes los que proyectó en las ciudades de Azul, con un gran Ángel de la Muerte custodiando la entrada y la gigantesca sigla RIP realizadas en cemento y Saldungaray, donde aparece el Cristo crucificado en un frente circular.
Los Mataderos
Funcionales en su representación arquitectónica. Uno de los principales exponentes es el de Coronel Pringles, cuya torre simboliza la hoja de una cuchilla.
Lamentablemente, todos están en estado de abandonado, con partes derruidas y sin planes ni proyectos de ser restaurados.
Su legado
Cuando terminó la administración del gobernador Fresco, en 1940, Salamone se trasladó con su familia a la capital, donde dirigió múltiples obras de pavimentación urbana y proyectó solo 2 edificios de estilo racionalista.
Francisco Salamone falleció el 8 de agosto de 1959, relativamente olvidado, pero dejando una herencia arquitectónica monumental en la pampa argentina. Sus restos descansan en el cementerio Jardín de Paz.
Ver también
https://www.sextaseccion.com/ciencia-y-tecnologia/estacion-ciencia/
https://www.sextaseccion.com/municipios/adolfo-alsina/una-obra-de-salamone-se-ilumino-de-azul/
https://www.sextaseccion.com/arquitectura-y-paisajismo/circuito-salamone/
https://www.sextaseccion.com/municipios/tornquist/mural-sobre-salamone-en-saldungaray/