No todo fue letra muerta ni promesas eternas e incumplidas.
En diciembre de 2006 el gobernador de la provincia de Bs.As. Felipe Solá mediante Resolución 651/06 y en el marco del Decreto 3441/06 puso en marcha el Programa Provincial Reencuentros para la restitución de la Identidad Biológica.
Ante nuestro reclamo y urgencia que merecía el tratamiento de nuestra problemática (apropiados, no adoptados) y sabiendo que la Legislatura Provincial no iba a actuar con la rapidez necesaria (hasta hoy, 2015 no lo ha hecho) el gobernador Solá puso en marcha este Programa.
Reencuentros estaba conformado por una Comisión Interministerial donde cada Ministerio (Gobierno, Salud, Seguridad, etc.) aportaría la información necesaria de su área. El Programa recepcionaba los casos, consultaba todos los archivos necesarios, se encargaba de la investigación propiamente dicha de cada caso (trabajo de campo), intermediaba entre las partes teniendo en cuenta siempre el derecho a la privacidad y a la intimidad garantizando confidencialidad. Organizaba además un archivo con los legajos de cada persona.
Por supuesto, al ser el Derecho a la Identidad un derecho personalísimo y voluntario debía presentarse únicamente la persona afectada, no otra.
Reencuentros había comenzado a dar sus primeros pasos pero llegaron las elecciones, ganó Scioli y una de sus primeras medidas fue dejar sin efecto este Programa.
Desde entonces la provincia de Buenos Aires solamente se ocupa de los casos de lesa humanidad y de la identificación de personas (DNI).
Por primera vez se había hecho algo concreto para todos los apropiados nacidos en la provincia, un Programa ejemplificador, único en el país.
La excusa fue que «por 30 personas no vamos a movilizar al Estado» cuando al mismo tiempo, en el Ministerio de Seguridad de la provincia tenían recepcionados en ese entonces más de 500 casos.
La Constitución Nacional y la Provincial (art.12) son claras: el Estado debe garantizar este derecho a cada ciudadano, no importa si son 10, 100 o 1 millón.
De un día para el otro Scioli nos cerró la puerta a la posibilidad de acceder a nuestra Verdad, al derecho humano prioritario de todos los seres humanos: el Derecho a la Identidad.
Graciela Palma Arizaga (Ciudadana sin Identidad) – DNI (con datos falsos) 16.496.527 – palmagraciela@gmail.com